EL SONIDO HECHO VISIBLE
J. J. FERNANDEZ
Diario Vasco. 30/08/2008
Profundo conocedor de la tradición de la llamada Escuela de escultura vasca de vanguardia -la que comenzó con Jorge Oteiza y Eduardo Chillida, y continuó con Nestor Basterretxea y Ricardo Ugarte, entre otros, primero y más tarde a través del trabajo de artistas como José Ramón Anda-, Antón Mendizábal (San Sebastián, 1945) nos enseña a través de su trabajo escultórico que no sólo ha analizado y ha resumido las mejores características de esta Escuela, sino que las ha entendido y la ha asimilado correctamente, produciendo un trabajo respetuoso tanto con la tradición artesanal vasca en la que se inició, como con la vanguardia propuesta por la Escuela de escultura vasca citada, pero a la vez personal y singular, con voz propia para comunicarse a través de un lenguaje abstracto pero universal que llega al espectador.
En esta ocasión, bajo el título Soinuak soin-El sonido hecho visible, Mendizábal nos propone en la Sala Boulevard de la Kutxa en San Sebastián un grupo de creaciones escultóricas en las que ha partido como fuente de inspiración de la música del compositor y organista francés Olivier Messiaen (Aviñón, 1908-Clichy, 1992), un músico que supo combinar durante su trayectoria magistralmente la tradición con la vanguardia -al igual que la Escuela de escultura vasca de vanguardia-, y al que la Quincena Musical de San Sebastián dedica un nuevo homenaje en la edición de este año que se está celebrando durante estas semanas.
Son un total de 25 esculturas en las que Mendizábal ha tratado de trasladar el universo musical de Messiaen, un músico con una concepción creativa singular y propia, y que siempre demostró tener un sonido muy plástico, con diferentes contrastes y colores.
Aunque resulta difícil la tarea, hay que reconocer que en muchos de los trabajos de Mendizábal el escultor guipuzcoano consigue plasmar la sensibilidad del músico francés a través de unos trabajos exquisitamente realizados, y como es habitual en él, con una clara tendencia hacia la estética y la investigación en torno al concepto del espacio. Además, la exposición permite utilizar audio-guías individuales con información sobre cada escultura con su música correspondiente, ofrece la audición individual a la carta permanente de obras musicales de Messiaen, se proyecta el documental de mismo título que la exposición sobre la vida del compositor y organista francés y su relación con la obra de Mendizábal, y lo que es más interesante, se ha organizado un programa de actuaciones -los martes de cada semana mientras dure la exposición, hasta el 14 de septiembre- con músicos que improvisan con sus respectivos instrumentos -piano, guitarra, txistu- en torno a las esculturas realizadas por Mendizábal; de este modo se abre una nueva posibilidad que aunque cierra el círculo, se convierte en una propuesta muy estimulante e interesante.